En mi status de persona en vacaciones y más aun, en mi condición de oficial de la Altísima Orden de los Paladines Post Modernos, realizo un llamado a una huelga, a través del honroso Sindicato de Paladines Post Modernos (SPPM, en adelante).
Compañer@s Paladines!
Durante años hemos sido vapuleados por las condiciones socio históricas de esta Era. Hemos nacido/encarnado en una época a en la cual los que valoran la sinceridad, el compromiso y la bondad, son cada vez menos. Donde las funciones que tradicionalmente cumplía nuestra profesión, se han visto no reemplazadas, sino eliminadas, instaurandose necesidades de corte narcisista, de satisfacción personal, de alejamiento del resto.
Nos encontramos en un mundo donde se cuentan antiguas leyendas sobre nuestra existencia, pero se cree que desaparecimos. Ya nadie cree que se pueda ser buena gente o dadivoso (en ultimo termino), sin que se espere algo a cambio. Ya nadie cree que alguien se detenga en la calle, al ver que un extraño llora, y le pregunte si es que puede ayudar en algo.
También suceden cosas extrañas, Un día alguien le solicita al universo que aparezcas y cuando llegas, te dicen:
1.- Pero si yo nunca pedí que aparecieras en mi vida.
2.- No, no podemos estar juntos porque te haría mucho daño.
3.- Eres una persona genial, pero como que no funcionaríamos como pareja.
4.- Yo me casaría contigo, pero aun quiero disfrutar de la vida.
5.- Eres la persona perfecta para casarse, pero no para pololear.
6.- Gracias por acompañarme todo este tiempo, pero ahora encontré a alguien con quien quiero estar, así que Adiós.
7.- (Después de que te dejaron de hablar por unas semanas) Fue lindo, pero ya se acabo el tiempo.
8.- Eres un gran amig@ (subtitulo: no cuentas como candidat@ a nada).
9.- Ahora No, quizás después si (cuando ese futuro un@ sabe que no existe).
10.- No te preocupes, siempre seremos amigos.
Esas oraciones son sólo una muestra de aquello que ha ocurrido consistentemente, en la vida de cada Compañer@ con que me he encontrado en mi vasta trayectoria en el gremio.
Si analizamos la situación laboral, camaradas de brillantes armaduras, tampoco no es favorable. Ya había enunciado que nuestro nicho de mercado se ha ido reduciendo, al igual que los afiliados al gremio y participantes de la Orden. Según otros autores paladinezcos, la situación contractual con nuestro empleador (el pulento) se describe como la siguiente:
a.- No se posee claridad sobre las exigencias del trabajo, sólo cuando te desvías del camino atinan a mandarte a alguien que entiende un poco más que tú, para ver como se arregla. De otro modo, no hay como saber cuando lo estás haciendo bien.
b.- Es realmente dificil verlo o pedir una reunion con él, pero siempre estará presente. Esta parte es muy extraña, si bien siempre te acompaña, son raras las ocasiones en que se pronuncia.
c.- Se te ofrecen un millar de beneficios, sin embargo por una extraña razón, cuando te enfocas a trabajar en el rubro, no percibes los beneficios.
d.- Tienes conciencia que puedes trabajar con él o con la competencia. Sin embargo como conoces las consecuencias d jugar para el otro bando, no lo haces.
e.- Aunque pidas ayuda esta llegara si y solo si, lo pasaste lo suficientemente mal, como para pensar en renunciar.
Por todo esto y por otras razones, que ustedes ya conocen, en la asamblea del SPPM, levanto la moción de huelga, hasta que las condiciones sean lo suficientemente buenas, como para que valga la pena el ser un Paladín...
Paladines del Mundo, Uníos! Dejad las Armaduras Brillantes y las Espadas a un lado, este es le momento de reinvindicarnos como gremio...
Compañer@s Paladines!
Durante años hemos sido vapuleados por las condiciones socio históricas de esta Era. Hemos nacido/encarnado en una época a en la cual los que valoran la sinceridad, el compromiso y la bondad, son cada vez menos. Donde las funciones que tradicionalmente cumplía nuestra profesión, se han visto no reemplazadas, sino eliminadas, instaurandose necesidades de corte narcisista, de satisfacción personal, de alejamiento del resto.
Nos encontramos en un mundo donde se cuentan antiguas leyendas sobre nuestra existencia, pero se cree que desaparecimos. Ya nadie cree que se pueda ser buena gente o dadivoso (en ultimo termino), sin que se espere algo a cambio. Ya nadie cree que alguien se detenga en la calle, al ver que un extraño llora, y le pregunte si es que puede ayudar en algo.
También suceden cosas extrañas, Un día alguien le solicita al universo que aparezcas y cuando llegas, te dicen:
1.- Pero si yo nunca pedí que aparecieras en mi vida.
2.- No, no podemos estar juntos porque te haría mucho daño.
3.- Eres una persona genial, pero como que no funcionaríamos como pareja.
4.- Yo me casaría contigo, pero aun quiero disfrutar de la vida.
5.- Eres la persona perfecta para casarse, pero no para pololear.
6.- Gracias por acompañarme todo este tiempo, pero ahora encontré a alguien con quien quiero estar, así que Adiós.
7.- (Después de que te dejaron de hablar por unas semanas) Fue lindo, pero ya se acabo el tiempo.
8.- Eres un gran amig@ (subtitulo: no cuentas como candidat@ a nada).
9.- Ahora No, quizás después si (cuando ese futuro un@ sabe que no existe).
10.- No te preocupes, siempre seremos amigos.
Esas oraciones son sólo una muestra de aquello que ha ocurrido consistentemente, en la vida de cada Compañer@ con que me he encontrado en mi vasta trayectoria en el gremio.
Si analizamos la situación laboral, camaradas de brillantes armaduras, tampoco no es favorable. Ya había enunciado que nuestro nicho de mercado se ha ido reduciendo, al igual que los afiliados al gremio y participantes de la Orden. Según otros autores paladinezcos, la situación contractual con nuestro empleador (el pulento) se describe como la siguiente:
a.- No se posee claridad sobre las exigencias del trabajo, sólo cuando te desvías del camino atinan a mandarte a alguien que entiende un poco más que tú, para ver como se arregla. De otro modo, no hay como saber cuando lo estás haciendo bien.
b.- Es realmente dificil verlo o pedir una reunion con él, pero siempre estará presente. Esta parte es muy extraña, si bien siempre te acompaña, son raras las ocasiones en que se pronuncia.
c.- Se te ofrecen un millar de beneficios, sin embargo por una extraña razón, cuando te enfocas a trabajar en el rubro, no percibes los beneficios.
d.- Tienes conciencia que puedes trabajar con él o con la competencia. Sin embargo como conoces las consecuencias d jugar para el otro bando, no lo haces.
e.- Aunque pidas ayuda esta llegara si y solo si, lo pasaste lo suficientemente mal, como para pensar en renunciar.
Por todo esto y por otras razones, que ustedes ya conocen, en la asamblea del SPPM, levanto la moción de huelga, hasta que las condiciones sean lo suficientemente buenas, como para que valga la pena el ser un Paladín...
Paladines del Mundo, Uníos! Dejad las Armaduras Brillantes y las Espadas a un lado, este es le momento de reinvindicarnos como gremio...
3 comentarios:
Justicia para nosotros también!!!
No más pasar pellejerías para que después te hagan tapa!!!
Hasta que las condiciones no mejoren, creo que ya no correremos por nadie...
Ya no me pesan la armadura ni la espada. Y me doy cuenta de que puedo correr increíblemente rápido, incluso parece que vuelo... y lo disfruto!
Saludos y todas mis vibras en estos tiempos difíciles. Ya no sobreviviremos. Por fin vamos a VIVIR!!!
Es una realidad que tarde o temprano un hombre tendría que reconocer. Pero la experiencia me ha enseñado que la felicidad que nosotros, los Paladines, buscamos, es una felicidad por la que hay que luchar, no esperar o exigir como un "reclamo de justicia". Es la felicidad que los hombres no se atreven a buscar por temor al dolor y a descubrirse a sí mismos.
Me quito mi armadura y dejo mi espada, porque hoydia lo que el cuerpo adolece no se compara a la soledad del espíritu, pero no hay mayor dolor que el de ser derrotado por una humanidad sin esperanza y convertirse en otro cascarón vacío más.
Es solo mi pensamiento y mi corazón, respeto aun así la causa porque en gran parte es un deseo que viene a mí de forma recurrente...
El otro día me encontré una billetera en la alameda. Tenía un pase, carné, todos los documentos y boletas qe te puedas imaginar y tres lucas. Hice lo posible para encontrar a la jovencita que la había perdido (Jazmine). Y finalmente se la devolví. Y no le saqué ni una luca. Ni la soborné. No digo que me fue fácil. Eso fue un esfuerzo posmoderno, de la categoría paladinesca.
Hay algunos que aún creemos, aún!
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